viernes, 15 de julio de 2011

 






















A FACUNDO CABRAL

A los poetas no se les acaba el tiempo,
han nacido sin relojes y se van sin ellos,
no conocen la muerte,
porque sus poemas son eternos,
su vivir es como la plenitud de las flores,
uno, juraría que se marchitan,
más no es así, porque su aroma al final
de su existencia,
penetra los rincones de nuestras entrañas
y se queda ahí....
.... en la eternidad del aqui y el ahora

Gustavo